lunes, 27 de julio de 2009

Entra

-Entra, creo que te estaba esperando.

Perdona el desorden, y no temas a estos muros de hormigón, si te fijas bien observarás grietas enormes que hacen tambalear los cimientos. Encontrarás los retos de la última cena, y un poco de vino en una copa sucia. Tal vez, no sea lo que esperabas, pero, sinceramente, diré a mi favor, que he descuidado tanto el interior pensando que nadie se atrevería a visitarme. Y aunque parezca oscura la vivienda creo que podría probar abrir las ventanas para que entre aire fresco.

No puedo prometer ser el mejor anfitrión, ni siquiera puedo asegurar que no saldrás corriendo, no se bien que podría dar para hacer que te quedes en mi guarida a pasar una velada, pero puedo afirmar que seré sincera. Sé con seguridad que no podre asegurarte el amor eterno, ni la felicidad soñada, pero si puedo prometer que jamás dañaré tu integridad, pazté con quien no debía no volver a pisar el terreno de lo bello, es por ello que vivo en un sito como este. A penas hay luz para no ver el desorden de mi vida, casi no hay aire porque no estoy segura de querer seguir viviendo, pero todo esto cambió cuando vi tus ojos. He empezado a limpiar el habitáculo y acondicionarlo de la mejor manera para que sea de tu agrado, solo espero que tengas en cuenta, que al menos por mi parte, lo estoy intentando.

domingo, 26 de julio de 2009

Cambio de profesion


Tras meditar cuidadosa mente todo a lo que me dedico y si vale la pena, he decidido cambiar de profesión, (un segundo ha bastado).


Todo empezó hace algunos años, cuando quería estudiar medicina forense, pero... cosas de la vida, elegí especialista. Si, esos que sufrimos todos los desastres de las maravillosas películas que veis a menudo por el cine, pero, que permanecemos en la tiniebla. Y no es porque nadie sepa que soy yo la que se lleva los golpes o la que corre peligro, si no , que mi cuerpo tiene ya demasiadas cicatrices, y tras la ultima interpretación, no me quedan fuerzas para seguir.


Ha sido el papel de mi vida, el que todo el mundo ve y recuerda como algo grande, y así lo he vivido y creo que me salió bien, pero, aun no han cicatrizado los injertos numerosos que me llevo de recuerdo, y aunque orgullosa de poder decir : "yo fui esa", no puedo seguir aquí como si nada, ya no me quedan trozos de cuerpo para coger y reconstruir los nuevos golpes. Por consiguiente y sabiendo que se me recordará por mi última escena, me despido de todo esto y me dedicaré a lo que siempre he querido y siempre he respetado.


The end.